Desafíos sensoriales en el autismo
Los desafíos sensoriales son comunes en las personas con autismo, y pueden incluir hipersensibilidad o hiposensilbilidad a estímulos como el ruido, la luz, el tacto o el olfato. Estos desafíos pueden ser abrumadores y afectar la calidad de vida de la persona y su familia. Aquí te ofrecemos algunos consejos para enfrentar los desafíos sensoriales en el autismo.
- Identifica los desencadenantes
Es importante identificar qué estímulos sensoriales son los que desencadenan una reacción en la persona con autismo. Puede ser el ruido de una aspiradora, la luz brillante de un foco, el calor o el frio, el olor a comida o el tacto de ciertas texturas. Una vez que se identifican estos desencadenantes, se pueden tomar medidas para evitarlos o minimizar su impacto.
- Crea un ambiente sensorialmente amigable
Crear un ambiente sensorialmente amigable puede ayudar a reducir el estrés y la ansiedad de la persona con autismo. Esto puede incluir reducir el ruido ambiental, usar iluminación suave, evitar olores fuertes y usar ropa cómoda. También es importante tener en cuenta la temperatura del ambiente, ya que algunas personas con autismo pueden ser sensibles al calor o al frío.
- Ofrece opciones
Ofrecer opciones a la persona con autismo puede ayudar a que se sienta más cómoda y segura. Por ejemplo, si se va a una tienda, se puede permitir que la persona elija qué ropa quiere probarse o qué juguete quiere comprar. Si se va a un restaurante, se puede permitir que la persona elija qué plato quiere comer o en qué mesa quiere sentarse.
- Usa técnicas de relajación
Las técnicas de relajación pueden ayudar a reducir el estrés y la ansiedad en las personas con autismo. Esto puede incluir ejercicios de respiración, yoga, meditación o masajes. Es importante adaptar estas técnicas a las necesidades y preferencias de la persona con autismo.
- Busca ayuda profesional
Si los desafíos sensoriales afectan significativamente la calidad de vida de la persona con autismo y su familia, es importante buscar ayuda profesional. Un terapeuta ocupacional especializado en autismo puede ayudar a desarrollar estrategias para manejar los desafíos sensoriales y mejorar la funcionalidad y calidad de vida de la persona.
Identificar los desencadenantes, crear un ambiente sensorialmente amigable, ofrecer opciones, usar técnicas de relajación y buscar ayuda profesional son algunas de las estrategias que se pueden utilizar.
Recuerda que cada persona con autismo es única y es importante adaptar estas estrategias a sus necesidades y preferencias individuales.
– George Whitness